Un borrador de opinión filtrado describe los planes para que la mayoría de la Corte Suprema anule la histórica decisión Roe vs Wade del 1973 que garantizaba las protecciones constitucionales federales del derecho al aborto y la decisión Planned Parenthood vs Casey de 1992 que mantuvo estos derechos. Aquí hay un enlace al proyecto de opinión de la mayoría.
Mujeres en Lucha / Women in Struggle y el Partido de Socialismo Unido / Socialist Unity Party afirman que es hora de tomar las calles y resistir la inminente y profundamente reaccionaria decisión de la Corte Suprema que allana el camino para una oleada de ataques de la extrema derecha, incluidos los elementos neofascistas responsables del golpe fallido del 6 de enero de 2021.
Revertir Roe vs Wade busca hacer retroceder el reloj a la época en que las mujeres, especialmente las mujeres negras, latinas y pobres, se vieron obligadas a buscar abortos clandestinos.
Esta decisión es un ataque a los derechos de todos los géneros, incluidas las personas transgénero y el movimiento LGBTQ2S. Si se afirma, los argumentos en los que se basa el proyecto de opinión también socavarían muchos otros derechos a la intimidad ganados con tanto esfuerzo, incluido el matrimonio entre personas del mismo sexo, y se utilizarían para promover el ataque continuo contra las personas trans.
Este ataque también está profundamente relacionado con los ataques de la supremacía blanca contra el derecho al voto de las personas negras y latinas y los intentos de impedir que los trabajadores se sindicalicen.
En el análisis final, la derogación de los derechos reproductivos recaerá de manera desproporcionada sobre las mujeres de color y las mujeres pobres, así como sobre los hombres trans, las personas no binarias y de género no conforme que también necesitan el derecho al aborto. También afectará a las personas transgénero y LGBTQ2S al reducir su acceso a la atención médica. Las muy ricas siempre han encontrado una manera de acceder a abortos y a otros cuidados.
Los principales políticos demócratas y republicanos no han hecho casi nada para detener a la derecha y defender los derechos de las mujeres. Claramente, el ataque ha estado ocurriendo durante años; sin embargo, la Casa Blanca de Biden, con una mayoría demócrata en el Congreso, no hizo nada para prepararse.
En un abrir y cerrar de ojos, Biden y el Congreso se están preparando para entregar otros $33 mil millones de dólares para intensificar la guerra subsidiaria de EUA/OTAN contra Rusia y el Donbass. Pero siguen siendo incapaces de detener la tormenta que amenaza a millones de mujeres, personas de género oprimido y la clase trabajadora en general.
Lo que se necesita para detener esta tormenta es una movilización masiva en las calles, independiente de los partidos capitalistas. Esta movilización debe afectar el poder real detrás de la amenaza de la derecha: los grandes bancos y los patronos capitalistas.
Proponemos hacer una huelga de un día, faltar al trabajo por enfermedad, salirse del lugar de trabajo y hacer una sentada que sería costoso para quienes están en el poder. Nuestro poder como trabajadoras y trabajadores, como estudiantes y como miembros de la comunidad, puede trascender la Corte Suprema reaccionaria y las políticas lucrativas, antimujer, antitrans, antipueblo y antiobreras.
Cuando los negocios como de costumbre se detengan, ¡tendrán que revertir su plan!
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